Hoy les proponemos una receta ideal para servir con el desayuno o bien a la hora de la merienda y sorprender a los más pequeños de la casa,se trata de unas rosquillas glaseadas ideales para acompañar una taza de café, té o chocolate.
Muy sencillas de preparar, estas rosquillas glaseadas no llevan muchos ingredientes y solo necesitaremos un poco de tiempo para su preparación ya que uno de los secretos del éxito está en dejar descansar la masa una hora en la heladera antes de hornearlas.
Toma nota entonces de estas deliciosas rosquillas glaseadas y prepáralas hoy mismo para sorprender a la familia a la hora de la merienda.
Nombre Original de la Receta: ROSQUILLAS GLASEADAS
Ingrediente principal: HARINA
Ingredientes:
50 grs. de harina leudante
200 grs. de almidón de maíz
50grs. de manteca
50 grs. de azúcar
2 huevos
1 cucharadita de esencia de vainilla
Para el glaseado
azúcar impalpable cantidad necesaria
jugo de limón
Procedimiento:
- Para la masa de las rosquillas batir en un bol la manteca a temperatura ambiente junto con el azúcar hasta obtener una crema suave.
- Añadir los huevos de a uno por vez batiendo bien para incorporar los ingredientes y perfumar con la esencia de vainilla.
- Cernir la fécula de maíz junto con la harina leudante y agregar a la preparación anterior hasta lograr una masa homogénea que no se pegue en las manos.
Dejar reposar el bollo de masa en la heladera durante una hora.
- Estirar la masa con el palo de amasar hasta dejarla de un centímetro de espesor.
- Cortar medallones con un cortapastas circular, con un cortapastas más pequeño retirar el centro para formar las rosquillas.
- Colocar las rosquillas en una placa para horno enmantecada y enharinada, separadas unos centímetros unas de otras para permitir que crezcan durante la cocción.
- Cocinar las rosquillas en horno precalentado a 180º C por unos 10 minutos o hasta que estén levemente doradas y haya crecido.
- Retirar del horno y bañar con el glaseado que previamente se habrá preparado mezclando azúcar impalpable con jugo de limón hasta que quede con una textura liviana.
- Una vez frías retirar de la placa de horno.
Presentación:
- Servir las rosquillas glasedas acompañadas de una taza de té, café o chocolate.
