GASTRONOMIA LATINOAMERICANA GUIA MICHELIN

La famosa Guía Michelín lleva ya casi un siglo de permanencia en el mundo de la gastronomía y en la actualidad abarca 23 países ubicados en tres continente, sin embargo, hasta ahora Latinoamérica no ha resultado interesante para esta publicación ni para ser destacada con sus estrellas de calidad, otorgadas como reconocimiento a ciertos restaurantes desde el año 1926. 


Sin embargo, parece que esto debería cambiar en poco tiempo según los dichos del maestro de cocina Ovadía representante de Paxia, Distrito Federal (México) presente en la última cumbre gastronómica Madrid Fusión, recientemente realizada en la capital española. 

 Según este joven profesional y exponente de la nueva cocina Latinoamérica este reconocimiento sería una reivindicación a los cocineros de estas latitudes, haciendo una guía Michelín que incluyera a países como México, Venezuela, Perú y Brasil.

Al respecto Ovadía señala ejemplos concretos como Perú y Brasil con representantes de primer nivel como Gastón Acurio y Álex Atala, respectivamente, que según él han hecho las cosas bien. 

Similar cuestionamiento puede hacerse con relación a la gastronomía mexicana que ha sido reconocida en 2010 por la Unesco como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, un hecho por demás importante y que sin embargo no ha sido apreciado como un galardón por demás importante. 

Con estos y otros argumentos los representantes de la gastronomía latinoamericana consideran que esta emergente culinaria merece y reivindica su propia Guía Michelín, sobre todo teniendo en cuenta el excelente nivel que han alcanzado y los siguen haciendo muchos de los restaurantes de Latinoamérica y por ello requieren esta guía que abarque la región. 

Por otra parte, este tipo de publicaciones y sus estrellas de calidad otorgan un valor agregado al nivel gastronómico de un restaurante, a pesar que en definitiva el reconocimiento más importante que puede recibir este tipo de establecimiento es el de sus clientes. 

Así, un trabajo en conjunto como el que fue realizado en España oportunamente tendría un efecto beneficioso para el sector gastronómico de toda Latinoamérica, donde su gastronomía en reconocida y respetada.