El marinado sirve para preparar los más diversos tipos de carnes, brindándoles no solo mejor sabor sino también mejorando su textura y en ocasiones haciéndolas mucho más tiernas después de la cocción.
Existen infinidad de marinados pero hoy haremos referencia a los que pueden utilizarse para carnes blancas como la de pollo o pavo que al contrario de otras como las carnes rojas cobrarán mayor sabor sobre todo si la forma elegida para la cocción es a la parrilla.
Cocidas a la parrilla las carnes blancas ya marinadas como pollo, pato o pavo deben hacerse a fuego suave o sea alejada de las brasas para que puedan cocinarse en su interior de manera adecuada.
Una excelente preparación para marinar este tipo de carnes blancas es mezclar 3 cucharadas de salsa de soja, 3 dientes de ajos picados o triturados en mortero, 2 cucharadas de aceite de sésamo, 1 cucharada de vinagre de manzana, 1 cucharada de miel, sal y pimienta negra a gusto.
Una vez preparada la mezcla colocar la carne blanca a marinar durante por lo menos dos horas en una fuente profunda y cubierta con papel filme en la heladera.
Otro marinado sencillo para carnes blancas es el preparado con ajo picado, perejil, 1 cucharadita de pimentón dulce, 2 cucharadas de salsa de soja, 1 cucharadita de orégano y 1 cucharadita de mostaza, además de ½ vaso de vino blanco, de la misma manera que con el marinado anterior se deja en ese preparado unas 2 o 3 horas cubierto con papel film y en la heladera.
Por último, un marinado tradicional es el que se prepara con 2 dientes picados, 1 vasito de coñac, 1 cucharada de romero, sal y pimienta a gusto.
La cocción es el segundo punto más importante cuando se preparar carnes blancas marinadas ya sean al horno o a la parrilla ya que deben cocinarse de forma lenta y que queden doradas por fuera.
